Un secret (Un secreto) es una película francesa dirigida por Claude Miller (2007) inspirada en la novela autobiográfica homónima de Philippe Grimbert. Este filme nos presenta la historia de un niño, François (Mathieu Amalric como el niño ya adulto), que crece en el contexto de la postguerra en Francia, lugar donde su familia se ha refugiado huyendo del nazismo. A diferencia de sus atléticos padres (Cécile de France y Patrick Bruel), el niño nace débil y nunca logra llegar a ser un gran deportista. Esto hace que su padre no lo aprecie demasiado. El chico, a cambio, desarrollará una gran imaginación con vuelos premonitorios, a tal punto que comienza a hablar de un hermano imaginario, cosa que abruma a su padre.
Poco a poco el velo de misterio que rodea la historia irá desapareciendo gracias a la testarudez del muchacho por reconstruir su historia familiar, cosa que también lo ayuda a definir su identidad. Y la historia oculta, esa que por momentos nos confunde con escenas de calidez doméstica, llegará a rozar el horror y la tragedia. El secreto de familia no le será revelado hasta sus catorce años. Entonces se entera por boca de Louise (Julie Depardieu) de la existencia de una primera esposa y otro hijo de su padre que no llegaron a Francia.
La trama es narrada de forma elíptica. Así, en logradas escenas retrospectivas, la reconstrucción del pasado alterna con el presente. Los recursos visuales cromáticos nos permiten hacer la transición temporal. De este modo, la época actual es presentada en blanco y negro, mientras que el pasado conserva colores brillantes. Ese sencillo recurso permite articular todo el mensaje de la película poniendo en evidencia a quienes sobreviven, seres despojados de la alegría y la vida que tenían en el pasado.
La reconstitución temporal y la ambientación son cuidadas. La atracción sexual y la pasión entre los personajes de la historia que desata todo el drama es palpable y nos vuelve cómplices desde el comienzo del filme. Las actuaciones son logradas.
Este no es un filme clásico sobre el fascismo. Un Secret no supera a Schindler's List, Music Box, o Sophie's Choice. Sin embargo, su mensaje es igual de brutal porque nos habla de la forma en que el horror de los sistemas totalitarios perdura en la vida de aquellos que de una forma u otra -y aún sin quererlo, han sido sus víctimas.
Ya la puse en mi Queue de Nexflix.
ResponderEliminarMe recuerda "La llave de Sarah". No lo he leído, pero una amiga me contó bastante del libro y es tan fuerte... Los alemanes se llevan a una pareja y su niña a un campo de concentración, pero también tenían un hijo, un poco más pequeño. La hija, pensando que regresarían pronto a casa, encierra a su hermanito en un closet donde siempre jugaban, para que no se lo lleven también. Ella logra escapar del campo de concentración para salvarlo, pero ya habían pasado unas semanas.
Otra parte de la historia transcurre en la actualidad, y los personajes están ligados a esta historia que te acabo de contar.
Vi tu mensaje en mi blog. Quería comentarte algo en privado. Si no te molesta, escríbeme a macne_vero@yahoo.com
Abrazo,
Veronica
Hola Vero, no habia oido hablar del libro que mencionas. La historia al parecer, esta fuerte. Yo, sinceramente, tengo mucho trauma con las historias del fascismo. Suelo decir que en una de mis vidas anteriores seguro lo sufri de mala manera en carne propia porque el tema me afecta mucho, no de ahora, de siempre.
ResponderEliminarGracias por hablarme de "La llave de Sarah". Ahora soy yo quien anota uno en la lista de los pendientes :-) Y es que desde que estoy en el PhD raras veces tengo tiempo para leer literatura por puro placer. La mayor parte del tiempo me tengo que leer unos tabacones teoricos o articulos académicos igual de pesados... Pero bueno, sé que eso no sera eterno.
Te escribiré a tu cuenta sin falta. Supongo te dejé intragada, pero estamos a mano. Ahora yo también lo estoy. Gracias por pasar y comentar!
Es que alguien me mandó un mensaje sobre un grupo "de esos" en Canadá y a los mejor es el mismo de tus planillas. Así sale todo más completo.
ResponderEliminarA mí me dejan muy mal esas historias también, en fin, tengo que congesar que lloro con casi todas las películas y con muchos libros.
Vero, te estoy mandando una planilla que tiene la convocatoria de la Asociación de cubanos en el exterior para los residentes en Canadá. estas son las del evento del año pasado. Ojalá te sirva para ilustrar el comentario que te hicieron llegar desde aquí mismo.
ResponderEliminarEn pocas palabras, esto es más de lo mismo: un "empresario cubano" patriotero y "generoso" que decide poner en pie la asociación con todo el apoyo por parte del Consulado. ¡Qué lindo suena eso!, ¿verdad?
No he ido nunca a esas reuniones, ¿para qué? Aparte de conocer directamente a la persona que está a cargo de esa payasada, las considero filiales del CDR en el exterior. Es algo sencillamente vomitivo y de ninguna manera entiendo que los cubanos exiliados (sí, porque todos lo somos) se presten para algo así pues nadie los obliga a asistir a esas reuniones.
Por supuesto, que a nadie se le puede ocurrir tocar el tema de los aranceles porque a esa hora cambian la conversación para el tema de los cinco héroes. ¡Y mucho menos cuestionar el tema de los permisos de salida y las propiedades en Cuba!
Desgraciadamente, no acabo de encontrar las planillas de la "membresía", pero seguiré insistiendo. Esas muestran que aparte de tenerlo a uno ultra chequeado, encima pretenden seguir sacándole dinero a la gente con ese asunto. No pierdo las esperanzas. Sé que en algún lugar las tengo y si no puedo ir a buscarlas otra vez porque están a la mano descaradamente en el Consulado, junto a las planillas de prórroga de pasaporte, etc. Te las haré llegar cuando las encuentre. Mientras, sube esta.
Un abrazo.