Oye chica pero que bien se expresa ese hombre, Dios mío, yo que estaba cabizbajo con toda esta candanga de la visita del viejo del vestido y su encuentro con el otro viejo cagalitroso y patético, y mira tú, se me inflama el corazón al escuchar a un tipo del pueblo diciendo todo esto y de una forma correctísima. Ahora dirán que estaba allí para eso y que fue pagado por el imperialismo para que hablara.
Bueno, Gino, creo es evidente que el periodista se tomó el trabajo de entrevistar a uno de cada bando. Porque el "pinguero" —y disculpe la expresión, pero es así como les dicen a los que se visten de ese modo— que llevaba la cadenas de oro al cuello, el que defendía la posición oficial, ese se ve que estaba allí para contrastar la opinión de la gente de a pie con los que van obligados. Estos últimos son los verdaderos mercenarios, los que realmente paga el gobierno.
Me parece bien que a pesar de no tener televisor —como dijo en más de una ocasión, este Sr. que tan bien habló—, haga un esfuerzo por mantenerse informado. Síntoma de que a pesar del control centralizado de los medios, algo está cambiando rpofundamente en Cuba. Al menos el gobierno cubano ya no puede controlar el flujo libre de la información.
Oye chica pero que bien se expresa ese hombre, Dios mío, yo que estaba cabizbajo con toda esta candanga de la visita del viejo del vestido y su encuentro con el otro viejo cagalitroso y patético, y mira tú, se me inflama el corazón al escuchar a un tipo del pueblo diciendo todo esto y de una forma correctísima.
ResponderEliminarAhora dirán que estaba allí para eso y que fue pagado por el imperialismo para que hablara.
Bueno, Gino, creo es evidente que el periodista se tomó el trabajo de entrevistar a uno de cada bando. Porque el "pinguero" —y disculpe la expresión, pero es así como les dicen a los que se visten de ese modo— que llevaba la cadenas de oro al cuello, el que defendía la posición oficial, ese se ve que estaba allí para contrastar la opinión de la gente de a pie con los que van obligados. Estos últimos son los verdaderos mercenarios, los que realmente paga el gobierno.
ResponderEliminarMe parece bien que a pesar de no tener televisor —como dijo en más de una ocasión, este Sr. que tan bien habló—, haga un esfuerzo por mantenerse informado. Síntoma de que a pesar del control centralizado de los medios, algo está cambiando rpofundamente en Cuba. Al menos el gobierno cubano ya no puede controlar el flujo libre de la información.
Saludos